Agradecemos el esfuerzo, entrando automáticamente al bombo del Concurso de Rutas de este curso, cuyas bases aun no están publicadas pero que serán muy abiertas, para dar el mayor número de facilidades posibles. Ahí va:
Fecha de realización: 27 de octubre de 2013.
Aproximación a la zona: La excursión comienza en el albergue Logibar, carretera D26, 2 km antes de llegar a Larrau (Zuberoa-Francia). En coche son 160 km aproximadamente desde Donostia (por Iparralde). Calcular unas 2h30 para disfrutar de los pueblitos, maizales… y rotondas. Muy difícil llegar en transporte público.
GPS: perfil y mapa
Recorrido de la excursión y desnivel: Circular de 12,5 km. Punto más bajo en la salida, a 400 m.s.n.m., máximo de 986 m.s.n.m. (en el km.8 aproximadamente). Dificultad media.
inicio de las primeras rampas
Terreno: Bastante variado, hay tramos de pista ancha y tramos de senda muy estrecha, zonas embarradas, vadeo de algún arroyuelo, mejor con botas de monte. Sillas de niño, imposible.
Horario: Salimos a las 11:15 y llegamos a las 17:45 (6h30 con las paradas: para almorzar y comer; y para descansar y reagruparnos en varias ocasiones).
Asistentes: 15 personas, 8 adultos y 7 niños de edades 7-13 años, acostumbrados a caminar (sobre todo si van en cuadrilla... ).
Metereología: Muy buena, parcialmente cubierto y 15-20 ºC. Pero se atraviesan varias zonas de umbría y humedad, y otras despejadas y ventosas, así que nunca sobrará algo de ropa de abrigo en la mochila.
Observaciones: Se cruza la pasarela de Holzarte, absolutamente segura, pero no apta los que sufran mucho el vértigo. Una ladera con algo de exposición entre el km 5,5 y 6 (ver en la Descripción).
Descripción:
Los de la cuadrilla pasamos el fin de semana “largo” en el albergue Logibar. Sin madrugar mucho por tanto, salimos. El camino hacia la pasarela Holzarte comienza justo al lado del albergue. Tras cruzar una minicentral hidráulica comenzamos a subir. Al principio es suave, junto a un río a nuestra derecha. Este tramo está bastante transitado.
Luego se inclina algo más, y ya empezamos a separarnos del río. Atravesamos algunas zonas boscosas, y otras algo más abiertas. En las zonas más empinadas, hay algunos escalones.
En unos 45 minutos, se llega a uno de los puntos fuertes de la caminata. La pasarela de Holzarte. Construida para facilitar la explotación del bosque en 1920, y renovada recientemente. Deja el curso del río nada menos que 200 m por debajo, mirar hacia abajo cuesta. Y se mueve bastante con el paso de la gente y el viento.
Pero si te gustan los puentes, solo por verla ya merecería la pena el desplazamiento. Toda la estructura cuelga de dos cables anclados al terreno y apoyados en dos arcos de hormigón en los extremos. Ciertamente impresiona. Tras descansar y tomar algo seguimos la senda al otro lado de la pasarela. Por una zona de bosque cerrado (Bois de Holzarte), zigzagueando y ascendiendo de nuevo con cierta fuerza. El otoño se muestra en todo su esplendor, con la senda absolutamente cubierta de hojas.
¡la pasarela!
"into the pasarela"
Un poco antes del km.3 del recorrido, la senda desemboca en una ancha pista forestal, que lleva si se coge a la derecha al pueblo de Larrau. Nosotros giramos a la izquierda (a gauche... ). El recorrido se hace muy cómodo ya que ahora se llanea. Avanzamos con rapidez guiados por las marcas rojiblancas de GR. Estamos en la ladera de un barranco que al principio es ancho, pero que se ve cómo se va estrechando conforme nos acercamos a su cabecera. En todo caso, la pista sigue siendo muy buena, ancha y cómoda, entre grandes árboles. Eso sí, muy umbrío y húmedo.
Un poco más allá del km. 5 se llega al final del barranco, y se cruza al otro lado otra vez por un puente, esta vez mucho más pequeño. Aquí el agua baja del monte con mucha fuerza, su sonido es la banda sonora que nos acompaña cuando paramos a comer por allí cerca. Al otro lado del puente se comienza el regreso, y ya aparecen muchas indicaciones de por dónde retornar al Logibar.
camino a Logibar
En este lado del recorrido, y a diferencia del otro, apenas hay árboles, y la ancha pista se convierte en una senda estrechísima que discurre a media ladera, en la que solo se puede andar en fila india. En esta zona conviene atar a la chavalería más en corto ya que a nuestra izquierda, la ladera, aunque es herbosa y no da mucha sensación de peligrosidad, es bastante inclinada y bastante profunda.
Después salimos ya de la ladera, dejamos de llanear y volvemos a ascender más fuerte. Y llegamos a un collado con una fantástica vista (km.8 aproximadamente, 4h30 min desde la salida). Es el punto de mayor altura del recorrido. Se ve el pueblo de Larrau y el Ori-Orhy detrás. Aquí enlazamos con la GR10 (el transpirenaico por el lado francés). Y se siguen las indicaciones que señalan la vuelta al Logibar.
El recorrido se vuelve a hacer muy cómodo ya que la pista se ensancha y comienza un descenso muy suave. No mucho después debemos dejar ese camino ancho y girar a la izquierda siguiendo las indicaciones y las marcas amarillas. Aquí la senda se estrecha y en un momento dado se convierte en fuertemente descendente por el centro de una cresta. En esa zona, unos escalones nos facilitan la bajada (llevamos unas 6h00 de recorrido).
Ya estamos casi llegando, una vez realizado el descenso bastante rápido, el perfil vuelve a suavizarse y volvemos a entrar en una zona muy boscosa. Ya se va sacando un rato para ponernos al día con los móviles…
Y por fin, tras 6h30 min, llegamos de nuevo, al parking, junto a la minicentral hidráulica y el Logibar. Hemos cubierto más o menos el mismo desnivel que el agua que se turbina en la minicentral… Y nos ha aprovechado igual de bien…
Una gran excursión por el Pirineo del otro lado de la muga. Si se va con chavales, quizá para tomársela con calma, estando por la zona, ya que es un poquito larga. Pero la variedad de vistas, terrenos y paisajes merecen la pena. ¡Que la disfrutéis!
Texto y fotos: Rufino Gómez Santamaría
albergue de Logibar, cerca de Larrañe (Larrau)
jugando en Santa Grazi-bourg tras la excursión
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